El
proyecto
Anya Hindmarch es una diseñadora de accesorios de moda británica que fundó la marca que lleva su propio nombre en Londres en 1987. En 2007 hizo reaccionar al mundo de la moda con el bolso con el lema «No soy una bolsa de plástico», consiguiendo un éxito rotundo en todo el mundo. Colocando en un primer plano la problemática medioambiental, contribuyó de manera significativa a la reducción del uso de las bolsas de plástico. Hoy en día su nombre se asocia a la creatividad y la artesanía moderna, pues esta diseñadora pionera sigue forjando un camino sostenible para el sector de la moda.
En febrero de 2020 Anya Hindmarch lanzó una nueva colección al mercado con una versión: «Soy una bolsa de plástico». Estos bolsos están fabricados a partir de un tejido nuevo e innovador creado a partir de botellas de plástico recicladas y recubiertas con plástico de parabrisas también reciclados. Con este nuevo producto, Anya Hindmarch continúa sus esfuerzos de sensibilización sobre el problema de los residuos y el consumo de plásticos, una acción inspiradora para mostrar que la economía circular es posible.
En el proceso se prestó especial atención a cada paso en la fabricación y en los materiales reciclados utilizados en aras de garantizar la sostenibilidad y la calidad del producto final. El resultado demuestra que un cambio positivo es posible mediante el compromiso con la cadena de suministro para impulsar la innovación.
