Cambio Climático: La Realidad que Nos Enfrenta y lo que Está por Venir

El cambio climático ha pasado de ser una posibilidad futura a convertirse en una realidad que estamos enfrentando hoy. Si observamos cualquier año de la última década, encontraremos numerosos eventos climáticos extremos que, sin el cambio climático, probablemente no habrían ocurrido o no habrían sido tan intensos.

Berta Gibert Montaña

10 oct 2024 10 minutos de tiempo de lectura

El cambio climático ha pasado de ser una posibilidad futura a convertirse en una realidad que estamos enfrentando hoy. Si observamos cualquier año de la última década, encontraremos numerosos eventos climáticos extremos que, sin el cambio climático, probablemente no habrían ocurrido o no habrían sido tan intensos. Algunos ejemplos recientes incluyen las temperaturas extremas en Europa, América del Norte y China en 2023, la sequía prolongada en la región del Cuerno de África y las lluvias catastróficas en Libia que provocaron la rotura de tres presas y más de 3400 muertes. Todos estos fenómenos son el reflejo de un clima cambiante que afecta a todas las regiones del mundo.

Predecir el cambio climático futuro y su impacto en diversas regiones representa un desafío complejo. Para abordar este reto, se utilizan modelos climáticos, que son simulaciones por ordenador del sistema climático global. Estos modelos permiten realizar proyecciones al evaluar cómo podría reaccionar el clima ante distintos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero. Así, podemos comparar los efectos en una región específica en un escenario donde el calentamiento global se limita a 1,5 °C, en contraste con un escenario de acciones climáticas insuficientes, que podría resultar en un aumento de entre 2,2 °C y 3,4 °C.

Limitar el calentamiento global a 1,5 °C es esencial para evitar los efectos más graves del cambio climático; sin embargo, este objetivo se vuelve cada vez más difícil de alcanzar. Por lo tanto, es crucial que las empresas identifiquen, evalúen y se preparen urgentemente para las condiciones climáticas futuras.

¿Cuáles son los riesgos físicos relacionados con el clima?  

Los riesgos físicos relacionados con el clima son el resultado de la intensidad y la frecuencia de eventos climáticos extremos, así como de patrones climáticos, los cuales se ven intensificados por el cambio climático. Se clasifican en dos tipos:

  1. Riesgos agudos, que son eventos específicos como inundaciones, ciclones, olas de calor e incendios.
  2. Riesgos crónicos, que se refieren a cambios a largo plazo en las condiciones climáticas, como el aumento sostenido de las temperaturas, cambios en los patrones de precipitación y el aumento del nivel del mar.

Estos riesgos pueden impactar a las empresas de forma directa, a través de daños a edificios y equipos, o de forma indirecta, por medio de interrupciones en la cadena de suministro.

La magnitud de los riesgos físicos en el futuro depende de dos componentes clave: la exposición y la vulnerabilidad. La exposición se refiere a la probabilidad de que ocurra un evento climático en las ubicaciones relevantes para la organización, como inundaciones, olas de calor o sequías. Por otro lado, la vulnerabilidad se relaciona con la capacidad de la organización para prepararse y responder a estos eventos. Por ejemplo, los activos y equipos que no reciben un adecuado mantenimiento son más susceptibles a sufrir daños, mientras que la falta de formación del personal para gestionar eventos climáticos puede llevar a interrupciones en las operaciones. Cabe destacar que, aunque dos activos se encuentren en la misma ubicación geográfica, pueden presentar niveles de riesgo muy distintos debido a su diseño, preparación o capacidad de adaptación ante eventos climáticos.

Además, la evolución y magnitud de los riesgos físicos dependen de cómo cambien las emisiones de gases de efecto invernadero en diferentes escenarios climáticos. Por lo tanto, es necesario considerar múltiples escenarios plausibles para evaluar y prepararse adecuadamente ante los riesgos físicos. Esta evaluación se conoce como análisis de escenarios climáticos (ASC).

¿Por qué es importante estimar los riesgos físicos climáticos para los activos y la cadena de valor de su organización?  

Debido a los impactos del cambio climático a los que ya estamos expuestos, se estima que la economía mundial podría experimentar una reducción del ingreso del 19 % para 2050. Esta situación se refleja en una encuesta reciente realizada entre empresas del Reino Unido, que reveló que casi la mitad de los encuestados ya se ve afectada por el cambio climático. Estas empresas están experimentando aumentos en los costos operativos, interrupciones en la cadena de suministro y daños directos a sus activos. Además, cerca del 15 % de las empresas indicaron que se han visto obligadas a modificar su modelo de negocio.  

La adaptación a los riesgos físicos cobra una importancia creciente en los requisitos regulatorios y marcos de divulgación climática. Esto se refleja en las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima de 2017 (TCFD, por sus siglas en inglés), que sugirió realizar un análisis de escenarios climáticos que aborde tanto los riesgos físicos como los de transición e identifique medidas para reducirlos. Este enfoque se mantiene en las nuevas Normas Internacionales de Información Financiera S2 (IFRS S2), que enfatizan la necesidad de evaluar estos riesgos de manera cuantitativa y entender sus implicaciones financieras. Además, la Directiva sobre Información Corporativa en Materia de Sostenibilidad (CSRD, por sus siglas en inglés) incluye el análisis de riesgos físicos, considerando 28 peligros climáticos de la Taxonomía, donde la adaptación es uno de sus seis objetivos.

Cómo evaluar los riesgos climáticos físicos para su organización

Exposición: obteniendo información de modelos climáticos y conjuntos de datos complejos.

Al considerar los riesgos físicos, es esencial examinar cómo la ubicación de sus activos y su cadena de valor pueden estar expuestas a diversos peligros climáticos. La taxonomía de la Unión Europea incluye una lista de 28 peligros climáticos que pueden afectar a una organización, tales como inundaciones y olas de calor. Después de una evaluación inicial, puede ser necesario realizar un análisis más profundo sobre los riesgos físicos prioritarios en los lugares críticos. Esto ayudará a obtener estimaciones más detalladas sobre los peligros específicos que podrían causar daños y a calcular el impacto financiero (ver más sobre los impactos financieros a continuación).   

Los resultados de los modelos climáticos, combinados con modelos de impacto adicionales (por ejemplo, modelos hidrológicos que proporcionan estimaciones precisas sobre la extensión y profundidad de inundaciones), son clave para entender la exposición tanto histórica como futura. Los datos de los modelos climáticos pueden ser complejos y extensos, ya que deben considerar múltiples escenarios, horizontes temporales, ubicaciones y peligros. Por eso, es fundamental tener un buen conocimiento para analizarlos de manera adecuada. También es esencial considerar lo que no sabemos y las suposiciones que hacemos, ya que esto nos ayuda a tomar decisiones informadas y a evitar confusiones sobre lo que significan los resultados.  

Evaluación de Vulnerabilidades – Comprender el Nivel de Preparación de la Organización

Para obtener una comprensión completa del riesgo asociado a los peligros físicos, es necesario evaluar la vulnerabilidad de los activos y operaciones clave. Para ello, se requiere información sobre las características de estos activos, así como sobre las operaciones, procedimientos y procesos que se llevan a cabo. Para obtener una visión completa de la vulnerabilidad, la información analizada debe ofrecer detalles sobre:

  • Importancia: ¿Qué tan importante es un activo específico para las operaciones de la empresa?
  • Propensión al Daño: ¿Qué tan propenso es un activo a sufrir daños durante un evento adverso?
  • Capacidad de Adaptación: ¿Qué capacidad tiene su organización para ajustarse y adaptarse a los efectos del cambio climático?

La vulnerabilidad de las organizaciones y su cadena de valor ante los peligros climáticos no ha recibido la misma atención que el análisis de la exposición. En muchos casos, este aspecto se pasa por alto o se trata de manera superficial, ya sea utilizando datos genéricos de la industria o centrándose únicamente en uno de los componentes de la vulnerabilidad. Es fundamental evaluar todos los elementos clave de la vulnerabilidad para comprender de dónde surgen las debilidades dentro de la organización y sus activos. Esto facilitará la identificación de las acciones necesarias para fortalecer la resiliencia y evitar adaptaciones inadecuadas.

Impactos financieros de los riesgos físicos  

Los impactos financieros de los riesgos físicos pueden ser directos o indirectos. Los impactos directos incluyen el aumento de costes por daños en edificios y equipos. Los impactos indirectos pueden ser la pérdida de ingresos debido a una menor capacidad de producción por interrupciones en la cadena de suministro. Para estimar estos impactos, es fundamental comprender bien la exposición y la vulnerabilidad de la organización.

En los últimos años, hemos mejorado nuestra comprensión de cómo ciertos eventos climáticos pueden generar costes financieros. Por ejemplo, ahora sabemos que las olas de calor pueden afectar el bienestar y la productividad de los empleados. Asimismo, las inundaciones pueden interrumpir los negocios al afectar el transporte y el suministro de energía, lo que dificulta que los empleados lleguen a su trabajo.

Al analizar los riesgos climáticos, es importante reconocer que siempre existirán suposiciones y limitaciones en las estimaciones de los impactos financieros. Por lo tanto, es fundamental comunicar de manera clara y transparente los niveles de confianza e incertidumbre. Esto facilitará la toma de decisiones y orientará las acciones a seguir.  

Preparación para los Riesgos Físicos del Clima y sus Impactos Financieros

Muchas empresas están evaluando los riesgos físicos que el clima puede ocasionar. Pueden aprovechar los resultados de estas evaluaciones iniciales para estimar el impacto financiero de dichos riesgos y prepararse para mitigar los problemas más graves del cambio climático.

La mitigación se enfoca en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, mientras que la adaptación implica implementar cambios para enfrentar los efectos del cambio climático, tanto los actuales como los futuros. Las organizaciones deben evaluar varias acciones para reducir estos riesgos físicos y elegir las medidas más adecuadas para su situación específica.

Un paso clave para reducir los riesgos físicos es desarrollar un plan de adaptación climática. Este plan debe detallar las acciones a llevar a cabo, un cronograma para su implementación, los requerimientos de mantenimiento, su relación con otras actividades (como renovaciones, flexibilidad en la cadena de suministro y medidas para disminuir emisiones), y la asignación de responsabilidades para la gestión de riesgos.

La adaptación no solo ayuda a ahorrar dinero al enfrentar riesgos presentes y futuros, sino que también puede proporcionar beneficios adicionales. Por ejemplo, el uso de infraestructura verde para gestionar inundaciones puede mejorar la biodiversidad y disminuir el carbono en el ambiente.

La evaluación de los riesgos físicos y la elaboración de planes de adaptación deben ser parte integral de otras iniciativas climáticas y de resiliencia dentro de la organización. El Transition Plan Taskforce (TPT) recomienda que la adaptación y la resiliencia se incluyan en los Planes de Transición. Un plan de transición sólido no solo permite a la organización enfrentar los desafíos climáticos, sino que también potencia su capacidad para alcanzar objetivos sostenibles, asegurando así un futuro más resiliente y próspero.